Ferland Mendy volverá a pedir una mejora de contrato a final de temporada. El lateral francés, que ya intentó que el Real Madrid le mejorara el sueldo a final de la temporada pasada y el club se negó, volverá a intentarlo este verano sabiendo que el Paris Saint Germain se encuentra al acecho.
Cuando concluyó la temporada pasada, la segunda de Mendy en el Real Madrid y la de su consolidación como titular muy por delante de Marcelo, sus agentes pidieron una mejora de contrato que el Real Madrid le negó. En el club blanco entendieron entonces que, con la incertidumbre de la vuelta del público a los estadios por la pandemia, no era el momento de pedir más dinero.
Mendy jugó la baza del interés del PSG en ficharle pero su grave lesión, que le tuvo 5 meses sin jugar, fue una losa en su intención de presionar al Real Madrid, así que le tocó recuperarse y esperar tiempos mejores. En cuanto volvió de su lesión Mendy se ha convertido en titular e intocable para Ancelotti, por lo que este verano sus agentes volverán a llamar a las puertas del Real Madrid para pedir la mejora de contrato.
La intención de Mendy es hacer valer su posición de fuerza, similar a la de Casemiro, sin un recambio de nivel en la plantilla, para pedir otra vez una mejora de contrato que el club blanco ahora sí estudiará, pero nunca antes de que termine la temporada.
El pulso de Mendy
Mendy llegó al Real Madrid hace dos temporadas y media procedente del Olympique de Lyon. El club blanco pagó por él casi 50 millones de euros y firmó un contrato que expira en junio de 2025. El futbolista siente que existe cierto agravio comparativo entre su situación contractual y la de otros jugadores que han renovado con mejora de sueldo (Courtois, Casemiro y Fede Valverde) o con el nuevo súpercontrato que firmará Vinicius.
Con esos argumentos, y su innegable rendimiento deportivo, los agentes de Mendy volverán a llamar a las oficinas de Valdebebas y otra vez con el PSG, que claman venganza por el caso Mbappé, al acecho del lateral madridista. Quizá esta vez tenga más suerte o quizá le ocurra lo que a otros futbolistas que trataron de echarle un pulso a Florentino Pérez: que acabaron fuera del Real Madrid.